miércoles, 15 de junio de 2011

El dolor se puede muestrar de muchas formas.


Esta el daño físico, cuando te caes y, en ese momento, el dolor es tan intenso que lloras y gritas. 

En segundo lugar está el daño moral, el que es causado por ejemplo por echar de menos a alguien, por la pérdida de alguien a quien quieres, cuando te sientes mal por hacer algo que sabes que no deberías estar haciendo. 


Pero el peor dolor, el peor de todos, es cuando estos dos se juntan. Cuando quieres a alguien tanto como para llorar, cuando no puedes ni escuchar una canción sin querer desaparecer, cuando crees que mañana no podrás soportar el peso de cada segundo que pasa, ahí es cuando se te encoge el corazón, sientes cada terminación nerviosa de tu cuerpo y te duelen hasta los dientes. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario