jueves, 7 de febrero de 2013

- A veces las ganas se van. Pero siempre debes mantenerte sonriendo, así todos se preguntaran por dentro qué estas tramando.
- ¿Así funciona tu sonrisa?
- Es una de las más espantosas y hábiles formas de ocultar el dolor.
- ¿Y si alguien, en lugar de sólo pensarlo, te preguntara por qué siempre estás sonriendo? ¿Qué le dirías?
- Me reiría, y pensaría que posiblemente esa persona sea el amor de mi vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario